No tenga vicios, sean sensatos, sean sobrios y respetables, fueron los primeros cuatro consejos destacados en el evangelio de ayer, estos mensajes son directos a cada ser humano y principalmente a los jóvenes en el mundo actual.
“Sean sobrios. no tengan vicios de comeloneria, de embriagues, de vagancia por las calles” intervino Fray Domingo Pepe de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, el religioso afirmó que esto “tiene que ver como estar bien en la casa, para vivir bien con su familia, su señora, sus hijos” continuo – “tiene que ser sobrio ¨bonita la palabra sobrio¨, controlarse, no ser exagerado en las cosas, que sean respetables, los jóvenes tiene que ver como respetar a los ancianos, que sean sensatos” en ese sentido insto a “usar la mente, la razón , el corazón, el aprecio a los demás, no ser de mal carácter”.
A estos mensajes se suma la fuerza de la fe de cada persona, durante la homilía Fray Domingo Pepe la destaco como el mejor y mayor consejo del evangelio según san Lucas (17,7-10): “Que sean cimentados en la fe” la describió como la solidez y la estabilidad en las personas adultas, a la vez que llamo a las personas a hacer suya esta reflexión y no caer en los errores, “Quien está bien cimentado, no cae fácilmente en los errores” afirmo
“Tiene que estar bien cimentado en la fe, no se puede perder la fe que Dios le ha dado a uno, tiene que perseverar hasta el último, no importa las dificultades que uno tiene que pasar”. Estar cementado en la fe es un término que refiere a la firmeza y cuan grande es la fe del católico, en este sentido Fray Domingo Pepe la ejemplifico como una casa que está bien construida y no se arranca a pesar de las tormentas y huracanes.
El religioso explico que “hay errores y cuando uno es cimentado en la fe, no cae fácilmente en los errores”. Cerro la santa eucaristía intercediendo por la paz en cada uno de los católicos y ciudadanos, sugirió a San Francisco como ejemplo vivo de la felicidad humana.
